Historia de un equipo nacido para triunfar

Para entender los orígenes del Sogecable, uno debe remontarse a junio de 2003. Por aquel entonces, ningún componente del actual equipo imaginaba, ni por asomo, que terminaría jugando en este equipo y en esta competición.

Todo empezó en el bar que se encuentra en frente del colegio de la mayoría de componentes de este club, La Salle Gràcia. El profesor de gimnasia, Josep Maria “Pajillas”, actual jugador del eterno rival, el Drink Team, se acercó a Vito y le comentó que había oído de sus hazañas futbolísticas, por lo cual le ofrecía jugar el torneo de Copa. Vito aceptó, triunfó y renovó una temporada por el Drink Team. Con él se trajo a Vivi, y juntos formarían, uno en la portería y el otro en el ataque, una dupla básica para conquistar de nuevo la Copa y realizar un gran papel en la Liga.

Al terminar la temporada 2003/04, Vito propuso a sus amigos, amantes y practicantes del fútbol de toda la vida, crear un equipo en esa misma competición. La temida doble V (Vito y Vivi) tenía ganas de volar, crecer, liberarse del Drink Team, heredar algo de su fórmula y con un simple tirachinas poder derrocar a todo un Imperio.

El verano de 2004 se fecundó el Sogecable Choped (denominado Chopen por culpa del organizador). ¿Por qué ese nombre? Bien, yo mismo no se lo puedo explicar. Simple iluminación insignificante. Una vez decidido el nombre, el color de las camisetas (de diablos) y habiendo formado un bloque bastante equilibrado (recordemos a Albeck’s, Alberto y Markinhos, jugadores que ayudaron a qué este equipo creciera durante su primera temporada), empezamos el campeonato. ¿Resultado? Media tabla (más cerca de los puestos de campeonato que de descenso) y eliminados en cuartos en la Copa. Se saldó, por ser la primera, positivamente.

La camapaña 2005/06 fue para olvidar. Lesiones, jugadores poco comprometidos, mala suerte, mal ambiente con los árbitros y la organización…Hicieron que el Sogecable quedara último en la clasificación, aunque consiguió maquillar la temporada alcanzando las semifinales de Copa. Lógicamente, ese verano el equipo tenía que descender, pero unas oportunas negociaciones de Vito permitieron que el club siguiera otro año en la máxima categoría.

Los jugadores del Sogecable sabían que les había caído el santo del cielo. No podían desaprovechar esa oportunidad. Se fichó bien, compensando defensa y ataque; y todo el equipo se conjuró para darlo todo en cada partido. ¿Desenlace? Un año espectacular, con una peligrosa laguna en diciembre y enero, que hizo peligrar el campeonato y llegó a hacer que las tinieblas sobrevolaran al Sogecable, provocando el desánimo de algún jugador. Pero los espartanos, a partir de ese momento, juraron fidelidad a su fútbol y empezaron una racha espectacular, causa directa de qué en la última jornada y sin tres de sus jugadores, consiguieran alzar el título liguero con dos goles salvadores de Pekel a pocos minutos del final. Por fin, lo habían conseguido. Al tercer año fue la vencida. Pero no quisieron creérselo ya que a la semana siguiente empezaba la Copa. Competición en la que consiguieron llegar a la final, perdida con toda la dignidad y con gran desgaste en los fatídicos penalties.

A día de hoy, Sogecable ya prepara el inicio de una nueva temporada que se perfila difícil por las bajas que han causado los dos fichajes de la pasada temporada, que fueron clave. Para compensarlo, se ha llegado a un acuerdo con Eloi, maestro de la defensa, que puede hacer un trabajo muy importante de vestuario. Además, los servicios técnicos continúan buscando un séptimo jugador. En todo caso, Sogecable parte como vigente campeón de Liga y con su lema, que aún retumba allá donde va: “Esperamos que nuestros rivales desayunen fuerte, porque cada viernes noche cenarán en el infierno”.